Lake Chelan + Leavenworth

¡¡Este fin de semana ha sido GENIAL!! mi host family y yo hemos cogido el coche a la aventura sin rumbo claro para explorar un poquito más Washington...y la verdad es que acabó siendo todo un éxito.El sábado los niños irrumpieron mi habitación a las 5.45 am chillando: Raqueeel Raqueeeel, ¿te vienes, te vienes a la aventura? yo no entendía nada, me acosté la noche anterior a las dos porque salí de copas con unos amigos...y estaba muerta. Me dijeron que planeaban salir con el coche a hacer millas sin rumbo y a ver que encontraban. Si se topaban con un sitio bonito, harían noche. Empaqué mis cosas a lo loco y a las 6 am con mucho sueño ya estábamos en el coche.

Mirando el tiempo, al oeste de Washington llovería y habría lluvia...por lo que no era una buena idea tirar por ahí..así que fuimos hacia el este, donde supuestamente, al travesar las montañas haría un sol de justicia. Yo no acababa de creérmelo mucho, porque justamente hacía muchísimo frío ese día y empezaba a llover...

Empezamos a conducir, parando en el Starbucks de rigor a desayunar como buenos Seattlelianos, y continuamos la marcha. A eso de las 9 mi host mom encontró en internet muy buenas referencias sobre el lago Chelan, al este del estado. Así que ya teníamos meta. Cruzamos las montañas y pasamos los bancos de niebla densa, humedad y lluvias...contra mas subíamos peor tiempo hacía...y a los diez minutos el paisaje cambia por completo: desierto, sol de justicia y calor, mucho calor...45ºC. Sinceramente si no lo veo, no lo creo, es increíble el cambio climático de un sitio/momento a otro en este estado.



Finalmente llegamos a Lake Chelan, y mi host family decidió alquilar un barco para recorrer el lago, y fue de lo más divertido. Nos dieron un pequeño barco con flotador tipo doughnut tirado por una cuerda, y cuando el barco iba rápido y hacía giros bruscos, ¡costaba mucho mantenerse en él! nos reímos muchísimos, nos bañamos en el centro del lago (hacía muchísimo calor y el agua estaba caliente), y tomamos el sol mientras navegábamos por el inmenso y precioso Lake Chelan. Las vistas eran increíbles, y eso que solo estuvimos en una mitad del lago, porque es enorme.



Cuando se nos acabaron las cinco horas de alquiler del barco no queríamos que se acabara el fin de semana. Así que conducimos hacia Leavenworth, un pueblo "alemán" en Washington que es de cuento de hadas...todo está escrito en alemán, la gente viste con los trajes típicos de Bavaria, y la arquitectura es muy similar a la alemana...¡me enamoré!

De cuento de hadas...