El 28 de noviembre como buenos americanos celebramos Thanksgiving, o el Día de Acción de Gracias. Vinieron los abuelos y también algunos amigos de la familia. Como no, se cocinó el pavo típico de thanksgiving (enoooorme) y mash potatoes, así como el pumpkin pie, además de stuffing, green bean casserole, ensalada, tartas…

Mi aportación para Thanksgiving fueron las trufas de chocolate, que por suerte me salieron muy buenas y la verdad es que tuvieron muchísimo éxito:

Comimos sobre las 5 de la tarde, y antes de empezar el abuelo dio un discurso dando gracias por todos los momentos buenos del año y apeló a la diversidad de los comensales (había americanos, coreanos, españoles y rusos en la misma mesa). Después se hizo una larga sobremesa (nada típico de América…) hablando de países, culturas y experiencias. ¡Fue muy interesante, familiar y emotivo! Ojalá nosotros también tuviéramos esta tradición, no está de más recordar lo afortunados que somos una vez al año…