Beware...Halloween is coming! (part II)
Happy Halloween!...Y por fin se acerca el 31 de octubre!
El miércoles Stan me llevó a una haunted house en Tukwila, basada en Bloody Mary al estilo moderno, con muchos efectos especiales...Muy buena, ¡pero corta! eso si, nos reímos muchísimo..
El jueves fui a hacer de profesora en el colegio de mis niños, en Kindergarden (La clase de Jonathan). Pidieron voluntarios para ayudar en el colegio y así ganar experiencia en pedagogía. Hicimos varios juegos con los niños: pintar con acuarelas calabazas, pescar donuts con la boca, un bingo de Halloween, y adivinar con el tacto qué hay dentro de las cajas. Fue muy divertido y los niños disfrutaron muchísimo. Jonathan no paraba de decirle a todos sus compañeros: "Hey, she's my nanny! and she's spanish!"
Y finalmente, llegó la noche de Halloween. Las casas se desmadraron y empezaron a salir decoraciones espectaculares para la noche del trick or treat. Muchas alquilaban hinchables terroríficos, como una carroza de caballos tirada por un decapitado y dentro de la cual estaba el conde Drácula, que se levantaba...o máquinas de humo y burbujas negras que cuando explotaban se desvanecían en humo...radiocassettes escondidos con sonidos, muñecos que detectaban movimiento, gente escondida en los matorrales que salían a asustarte, decoraciones que brillaban en la oscuridad, luces...en definitiva, ¡INCREÍBLE! más que un barrio parecía un parque de atracciones y cada casa intentaba superar a la otra. Guerra de vecinos americanos en toda regla.
En el Trick or treat los niños van de casa en casa, se dice la frase y la familia les da caramelos...en este barrio, a veces les dan dinero, juguetes, bebidas...y los caramelos son chocolatinas individuales: Kit Kats, Reeses, m&m's, Snickers, Babyrull, Twix... yo hice el trick or treat con Jonathan y los mayores fueron por su cuenta. Aquí una ínfima parte de lo que recogieron: